Energia

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El término energía (del griego νέργεια enérgeia, «actividad», «operación»; de νεργóς energós, «fuerza de acción» o «fuerza de trabajo») tiene diversas acepciones y definiciones, relacionadas con la idea de una capacidad para obrar, transformar o poner en movimiento. El ser humano es una identidad energética, las características del mismo se encuentran en su ADN, son ácidos nucleicos que contienen las instrucciones genéticas usadas en el desarrollo y funcionamiento de todos los organismos vivos conocidos, y es responsable de su transmisión hereditaria. El ADN posee dos características estructurales de antenas fractales, conducción electrónica y auto simetría. La conducción eléctrica permite el movimiento de las partículas cargadas eléctricamente dentro del cuerpo y ese flujo produce nuestra fuerza de vida.

La vida misma tal como la conocemos está inextricablemente entrelazada con formas geométricas, desde los ángulos de enlaces atómicos hasta las moléculas de los aminoácidos, a las espirales helicoidales de ADN, al prototipo esférico de la célula, a las primeras células de un organismo que asume formas vesicales, tetraédricas, y formas tetraédricas y de estrella (dobles) antes de la diversificación de los tejidos para diferentes funciones fisiológicas.

El universo es más de 99,999% de espacio vacío, incluyendo nuestros propios cuerpos. Todas las cosas físicas están hechas de átomos que son sobre todo espacio vacío. Si el núcleo fuera del tamaño de una canica, los electrones serían motas de polvo a media milla de distancia. Cada cosa física tiene mucho espacio vacío en ella. Dentro de ese espacio vacío está la inteligencia y la frecuencia. La ionosfera es como las paredes de nuestra casa, nos protege, cuida el planeta. Tiene una ámbito de frecuencias vibratorias que solo permiten pasara las ondas, son gases ionizados con grandes temperaturas que prácticamente destruyen todo lo que nos podría hacer daño.  La frecuencia más baja, y al mismo tiempo la intensidad más alta, de la resonancia de Schumann se sitúa en aproximadamente 7,83 Hz. Los sobre tonos detectables se extienden hasta el rango de los 20.000 kHz (kilohercios). Por tanto desde el microcosmos celular al macro cosmos del universo, todo está relacionado a través de energía con diferentes frecuencias y resonancias.  Toda la existencia... toda la materia, toda la vida, todas las experiencias; todo debe su existencia en el mundo físico a las frecuencias.
 
Cuando nuestra perspectiva es mental,  pretendemos que todo sea de una forma concreta para sentirnos seguros. Sin embargo las cosas suceden según nuestra energía individual que  atrae  nuestras experiencias en el ámbito colectivo. Ese estado de recreación es continuo. Somos  una sinfonía de frecuencias que se proyecta a través de este universo y crea su realidad física. Uno es un maestro de su energía, y por lo tanto es capaz de controlar  todo lo que hace, todo lo que experimenta. La conducción eléctrica permite el movimiento de las partículas cargadas eléctricamente dentro del organismo y ese flujo produce nuestra fuerza de vida. En este sentido hay que destacar 5 aspectos fundamentales:
energía

• La alimentación como medicina.

• La habitabilidad que nos armoniza o distorsiona.

• Descubrir nuestra singularidad y realizarla.

• Canalizar nuestra capacidad de servicio a través de la labor que realicemos.

• Establecer relaciones de colaboración y correspondencia, en lugar de obligación y necesidad